Segundas oportunidades

sobretauladisseny
26 may 2016
2 Min. de lectura

¿Sois de los que creéis en las segundas oportunidades? Clara sí, ¡al menos con la ropa!

Hoy tenemos el gusto de visitar el pequeño taller de Clara Pujol, una amante de la moda y del trabajo bien hecho que ha escogido un camino muy particular donde plasmar todo lo que sabe hacer con un hilo y una aguja.

En esta habitación con vistas a la calle, llena de telas y en la que no puede faltar una radio es donde Clara se pone a trabajar, pero es paseando cuando encuentra su inspiración y también los materiales que darán vida a sus ideas.

A Clara le encanta el reciclaje, desde recoger muebles y transformarlos, a crear sus diseños a partir de ropa que ya no se usa, o mejor aún si es de otras épocas. Esto es lo que marca su estilo y nos asombra el trabajo y creatividad que requiere esta elección.

Estudió hace un tiempo diseño de moda, y aunque no se dedica a ello como su trabajo principal, nunca ha dejado de coser, imaginar nuevas prendas y fantasear con la creación de su marca personal, que cada vez está más cerca.

¿Y en qué consiste exactamente el reciclaje de ropa? Pues no hay nada que le guste más a clara que pasear por tiendecitas de segunda mano en busca de pequeños tesoros escondidos que pueda convertir en prendas nuevas y modernas. ¡Es increíble su capacidad para ver un nuevo diseño en un vestido que tú ni siquiera usarías para hacer trapos!

Además, nos habla de la dificultad de este trabajo, pues es mucho más fácil empezar una prenda desde zero encima de un gran trozo de tela que tener que adaptarte a las formas que ya tiene. Aun así, ésta adaptación le permite dar rienda suelta a la creatividad, trabajar sin patrones e ir probando cosas nueva que acabarán siempre en prendas únicas.

A parte de estos diseños reciclados tan particulares, nos muestra también algunas de esas prendas diseñadas enteramente por ella en las que podemos ver su estilo tan vivo y atrevido. Es éste el perfil que busca para su proyecto de futuro, un tipo de prenda que se pueda vestir con ganas, que muestre tu personalidad y con la que quieras salir a la calle hoy y dentro de cinco años porque esa pieza te representa y no quieres deshacerte de ella.